I Did It My Way

Mis reflexiones sobre política, deporte y cultura

11 dic 2010

Alarmado aniversario


Regresa I Did It My Way. Y lo hace por propia voluntad; no nos han movilizado los militares, tranquilidad. El pasado 6 de diciembre la Constitución cumplió su trigésimo segundo aniversario, y lo hizo más viva que nunca. Y es que la fuerza de su vigencia quedó de nuevo demostrada unos días atrás, cuando el Gobierno, ante la brutalidad de la acción –más bien omisión- de los controladores aéreos tuvo que decretar el Estado de Alarma para restaurar la normalidad del tráfico aéreo español.

En efecto, un artículo de nuestra Ley de Leyes, aún absolutamente impasible, casi como rogando ser utilizado, fue aplicado por primera vez en la historia de la democracia española. Resultó especialmente atractivo, pese a la gravedad y dramatismo de los hechos que se encuentran en el presupuesto de la medida, asistir a semejante aniversario en tan interesante Estado. El de Alarma. Ello demuestra una vez más que la Constitución Española no es un mero texto retórico que contempla derechos y libertades que uno puede convertir en papel mojado con unas pocas gotas. Y es que contempla garantías y salvaguardas, unas más leves, otras más férreas, para asegurar la efectividad y realidad de sus previsiones. Así, cuando los derechos de los ciudadanos eran vulnerados masivamente la tarde-noche del viernes día 3, la Constitución ponía al servicio del Presidente del Gobierno un arma poco conocida, pero especialmente eficaz, de cara al restablecimiento de la normalidad.

Sea pues ésta una apasionante pero virulenta forma de celebrar la plena vigencia de nuestro texto constitucional. El nuevo aniversario nos ha traído el recuerdo de que existe un texto supremo que vela por nuestros derechos y libertades del modo más implacable y certero posible: el consistente en el Estado de Derecho y el ordenamiento jurídico.